Como ya hemos visto en el caso de las tuberías, es un eufemismo hablar de un pozo de inspección de plástico, ya que este material presenta muchas diferencias según se trate de polietileno, polipropileno o PVC.

En general, hablamos de un material que se utiliza cada vez más en la construcción porque tiene numerosas ventajas. El uso de pozos de inspección de plástico presenta las siguientes características:

  • ligereza que facilita la manipulación, el almacenamiento y la instalación in obra;
  • facilidad y rapidez de colocación;
  • facilidad de montaje in obra;
  • garantía de estanqueidad hidráulica, gracias a la presencia de juntas para la conexión a tuberías pasantes;
  • posibilidad de crear un sistema integrado compuesto por el mismo material con las mismas características de resistencia a la abrasión y a los productos químicos que las aguas residuales;
  • posibilidad de construir pozos de inspección de plástico a petición del proyectista (por ejemplo, pozos de esquina, pozos de salto, pozos de varias entradas);
  • plazos de entrega rápidos, especialmente en el caso de los pozos de inspección de base moldeada;
  • posibilidad de conexión de tuberías de otro material (PE liso, PVC, gres).

En comparación con los pozos de inspección de hormigón utilizados normalmente para las redes de alcantarillado, los pozos de inspección de plástico garantizan:

  • mayor resistencia a la abrasión, lo que permite una larga vida útil de los pozos de inspección;
  • mayor resistencia a la agresión química de ácidos y disolventes;
  • menos peso, lo que reduce el tiempo final de construcción y, sobre todo, el riesgo de accidentes;
  • extrema versatilidad debido a que el plástico es un material más flexible y permite una amplia gama de pozos de inspección.

 

Todos los pozos de inspección de Polieco                            Composición de un pozo de inspección