La correcta instalación es un requisito esencial para garantizar la durabilidad y eficacia de todos los productos de construcción, incluidas las tapas de registro. Las tapas de registro mal instaladas, independientemente del material del que estén hechas, pueden tener efectos perjudiciales e incluso peligrosos para la integridad de peatones y vehículos. Por lo tanto, la instalación de tapas de registro debe ser realizada por personal debidamente formado y cualificado que utilice el equipo adecuado.
La tapa de registro debe ser siempre de la clase apropiada en función del lugar en el que se vaya a utilizar y, en consecuencia, de los esfuerzos a los que vaya a estar sometida; en caso de duda, se debe utilizar un dispositivo de una clase superior a la estrictamente prescrita. El proyectista también debe elegir el tamaño apropiado de la apertura (espacio neto) para garantizar un acceso seguro.
Además, antes de la instalación hay que comprobar lo siguiente:
En cuanto a la elección del material de lecho de colocación, si se puede organizar el cierre de la carretera, se podrá utilizar mortero de hormigón con una resistencia característica a la compresión (Rck) superior o igual a 50 N/mm2, respetando los tiempos de curado prescritos por el fabricante.
Si es necesario reabrir rápidamente la carretera al tráfico, las tapas de registro deben colocarse sobre materiales de colocación de endurecimiento rápido con las siguientes características mínimas:
Cuando sea necesario elevar el nivel de la carcasa de la tapa de registro en los pozos, se puede utilizar un material de calce, que debe tener una resistencia mínima a la compresión de 50 N/mm2, ser duradero y compatible con los materiales de instalación que se vayan a utilizar.
Generalmente, los materiales de calce son de hierro fundido, acero u hormigón; no se permite el uso de ladrillos perforados, tejas y/o baldosas trituradas, trozos de madera o material plástico y, en cualquier caso, cualquier material que no ofrezca las necesarias garantías de resistencia y durabilidad.
El contratista debe comprobar en primer lugar que el pozo de registro, ya sea prefabricado o instalado, está intacto y es capaz de soportar estructuralmente la tapa de registro que se va a instalar.
También es esencial asegurarse de que el bastidor y el lugar de instalación del pozo estén limpios, eliminando cualquier resto de barro, grasa y suciedad. Si es necesario, la cabeza del pozo puede ser rugosa para mejorar el agarre del material de colocación.
La profundidad de la carcasa debe realizarse teniendo en cuenta la altura de los dispositivos para instalar, de forma que se evite en lo posible el uso de materiales de calce. La anchura de la carcasa debe ser al menos 1,6 veces la dimensión externa máxima del bastidor del dispositivo que se va a instalar, para tener la posibilidad de crear un bordillo de hormigón consistente y uniforme a su alrededor.
Es aconsejable mezclar el material de colocación de forma mecánica y no manual para obtener un producto homogéneo: la operación debe completarse muy rápidamente y, en cualquier caso, antes del endurecimiento rápido.
Inmediatamente después de colocar el material de colocación, se debe colocar rápidamente el bastidor en cota, centrando la sección libre del bastidor con la del pozo de registro y ejerciendo una presión adecuada sobre el lecho de colocación para garantizar un agarre firme, asegurándose de que ninguna parte interna del bastidor sobresalga en el pozo. No está permitido colocar el bastidor directamente sobre la cabeza del pozo.
El bastidor debe colocarse en el lecho de colocación de forma que su superficie de apoyo del mismo se apoye adecuadamente en la cabeza del pozo/cámara. Si se va a instalar el tapón de registro en presencia de tráfico de vehículos pesado y/o frecuente, es aconsejable anclar el bastidor del tapón de registro a la losa de hormigón o a la pared del pozo de hormigón situado debajo, colocando pernos de anclaje en las ranuras circulares correspondientes del bastidor. Además, el bastidor debe colocarse a nivel de la superficie de la carretera utilizando puntos de referencia adecuados y de forma que quede coplanario con la superficie circundante.
Es necesario asegurarse de que no queden huecos entre la tapa de registro y el pozo, y se recomienda tener especial cuidado al aplicar el material de colocación en las proximidades del asiento de la tapa para evitar que se deposite material residual. Además, hay que asegurarse de que el material de colocación cubra los rebordes del bastidor con un grosor mínimo de 1 cm y sobresalga de los orificios y ranuras del propio bastidor, garantizando así un ajuste perfecto.
Los lechos de colocación de más de 4 cm de grosor deben aplicarse en dos fases: la primera capa debe tener un grosor de 2 a 4 cm, mientras que la capa siguiente debe aplicarse solo después de haber colocado entre ellas un material de agarre adecuado, teniendo cuidado de dejar un grosor residual suficiente para el acabado de la superficie de la carretera; las superficies expuestas de la capa, tanto dentro como fuera del bastidor, deben alisarse y uniformarse.
Las tapas de las alcantarillas solo deben insertarse cuidadosamente en los bastidores después de que el material haya proporcionado suficiente agarre y resistencia a la compresión, y solo después de una inspección y limpieza minuciosas del asiento de la junta y del asiento del marco donde se va a insertar la tapa.
El relleno de acabado alrededor de la tapa de registro debe hacerse después de al menos 3 horas con el mismo material de colocación, dejando una capa de al menos 3 cm para permitir el acabado de la superficie de la carretera con la colocación de asfalto. Debe evitarse el paso de los dispositivos de compactación por encima de la tapa de registro para no dañar el sistema formado por el lecho de colocación/bastidor/tapa. La instalación no debe someterse a ninguna tensión hasta que el material del lecho de colocación haya alcanzado una resistencia suficiente. Después de la instalación, el bastidor y la tapa/rejilla deben estar nivelados con la superficie de la carretera.
Deberán respetarse los tiempos de curado indicados por el fabricante del producto utilizado antes de hacer transitable la zona donde se encuentre la tapa de registro: en ausencia de indicaciones diferentes, deberá respetarse un tiempo de espera de al menos 72 horas.
Tapas de registro de material compuesto Cómo elegir la tapa de registro adecuada